FRACTURAS DEL PIE

Es la fractura del hueso que forma el talón, suelen producirse por una excesiva carga en el hueso como en caídas desde varios metros de altura.

Al ser una fractura que es frecuente que deje secuelas, existe mucha discusión en cuanto si todas las fracturas de calcáneo deben operarse. Es muy importante platicar con cada paciente todas las opciones de tratamiento y los beneficios de cada una de ellas según el tipo de fractura que tenga.

– Desgaste temprano de la articulación subastragalina.

– Disminución de la movilidad del tobillo.

– Dolor e inflamación en los tendones cercanos al calcáneo.

– Dolor en el tobillo.

Se usa el término de lesión de Lisfranc para describir la combinación de luxaciones y/o fracturas que se dan en entre los huesos cuneiformes y los huesos metatarsianos, éstos se encuentran en la parte media del pie. Suelen ocurrir cuando se produce una tensión excesiva en el mediopié, como en aplastamientos, choques, y caídas.

La gran mayoría requieren tratamiento quirúrgico, ya que se debe estabilizar la articulación de Lisfranc, ya sea con tornillos, placas o suturas especiales.

Las secuelas más comunes que puede dejar una lesión de Lisfranc son desgaste temprano, deformidad, y dolor en la parte media del pie.

El quinto metatarsiano es el hueso que está antes del dedo chiquito del pie. Su fractura suele estar asociada a una carga excesiva repetitiva o en mecanismos parecidos a los que ocasionan el esguince de tobillo.

Las falanges son los huesos de los dedos del pie y suelen fracturarse por traumatismos directos como golpes, por lo general no requieren de cirugía.