PIE DE CHARCOT

La diabetes es la causa principal en el mundo del pie de Charcot.

No. El pie de Charcot es una de las consecuencias de una diabetes mal controlada, pero si tiene:

• Hinchazón del pie.
• Enrojecimiento del pie.
• Callos recurrentes.
• Llagas o úlceras en los pies.
• Si el pie ha cambiado de forma.
• Si sus zapatos ya no le caben.

Es recomendable revisar sus pies todos los días y en caso de presentar alguno de los síntomas, que sea valorado por un especialista para llegar al diagnóstico correcto.

Normalmente no. Al producirse por un daño progresivo en los nervios que le dan sensibilidad al pie, los pacientes no sienten dolor, lo cual puede hacer que la enfermedad pase desapercibida en su inicio.

Lo más importante del tratamiento es lograr un control adecuado de la diabetes y evitar la formación de úlceras.

Primero se tiene que identificar qué es lo que está causando la úlcera y el tratamiento inicial suele ser utilizar plantillas u ortesis para descargar la zona de la úlcera.

Las úlceras o llagas en los pies pueden infectarse. Si esto no se trata y la infección se extiende por el pie puede causar problemas graves que en casos extremos pueden llegar a la amputación.

– Cuando existe una deformidad grave.

– Si el pie es inestable.

– Cuando una úlcera no desaparece con tratamiento conservador.

– Si ya no puede utilizar ningún tipo de calzado normal.

Se pueden realizar diversos procedimientos como la resección de una parte del hueso que está causando la úlcera, o la fusión de algunos huesos del pie para estabilizarlo. Es clave que antes de someterse a algún tratamiento invasivo en el pie sea valorado por un especialista capacitado para decidir el tratamiento idóneo.